EL TURISMO RESPONSABLE Y CUIDADO ES SEGURO, Y GENERA TRABAJO
Le solicito a la diputada y los diputados que conforman el bloque de SER UNIDOS a que insten al Poder Ejecutivo Provincial a que autorice el ingreso al territorio de Santa Cruz a todas aquellas personas extranjeras no residentes que acrediten fehacientemente haber completado el proceso de vacunación contra el COVID-19, y demuestren en cada caso encontrarse asintomáticas al momento de ingresar a Santa Cruz.
Pedimos para tal fin que se abran sin restricción los puertos, aeropuertos, pasos internacionales, centros de frontera y cualquier otro punto de acceso que tenga la provincia, especialmente los ingresos que existen desde la hermana República de Chile. La realidad que vivimos permite que todo interesado que quiera llegar a nuestro territorio pueda hacerlo libremente y sin restricción.
Resulta imperiosa la vuelta del turismo receptivo a Santa Cruz, sobre todo en aquellas localidades donde su explotación económica resulta ser el principal motor de trabajo e ingresos del lugar.
Por ejemplo, la crisis provocada por la pandemia trastocó la vida de El Calafate, donde casi todos sus residentes viven directa o indirectamente del turismo; algo muy parecido ocurre en El Chaltén. En dichas localidades, como en otras de la provincia, el coronavirus afectó todo el movimiento económico y social. En El Calafate, antes del DNU 260/20 llegaban unos 550.000 turistas por año, de ese total el 11 por ciento provine desde Chile, el 10 por ciento desde Brasil, otro 7 por ciento desde Italia, seguido por España y Francia.
La evolución de la situación epidemiológica, y el plan de vacunación que se viene llevando adelante en algunos países extranjeros, y principalmente en la Argentina, permiten una actualización o reconfiguración de las medidas sanitarias y de control que se vienen aplicando. Es necesario reactivar la economía de la provincia, la situación se ha vuelto insostenible para la mayoría de los santacruceños.
El requerimiento que estoy solicitando a nuestros legisladores va en sintonía con las políticas y medidas establecidas por el Gobierno Nacional. La perspectiva que se observa hoy en día es alentadora, sobre todo si se toman en cuenta los indicadores epidemiológicos locales y regionales.