Acercate a la reja, sos la dueña de mi alma. Sos mi luna cautiva que me besa y se va.
Tenía 13 años cuando tuvo un sueño revelador. Vio a un hombrecito de rodillas frente a un árbol y como un rezo repetía: “Vidala tengo una copla no me la vas a quitar..”
El changuito, de padre catamarqueño y madre riojana, pensaba un destino alrededor del futbol hasta que le pidió a San Nicolás que le revele en sueños su camino; y ahí con una vidala chayera cambio todo. El correr el almanaque con la guitarra como cruz por las rutas festivaleras quiso que la fama le llegará por otros senderos oscuros y sinuosos. Cuenta la historia que el Chango estaba en una guitarreada en la casa de su amigo el Loro de Barrio Gral Bustos de Córdoba.
Tema va, tema viene, vasos de vinos blancos en vasos verdes también iban y venían, termina de interpretar “A la sombra de mi madre”, una zamba de Carlos Carabajal y Cristóforo Juárez, pero al momento de dar los créditos olvidó nombrar a Juárez. “Ustedes los cantantes siempre se olvidan de los autores”, lo atizó uno de los presentes. El músico que era una brasa caliente saltó y en menos de un minuto se enredó a las trompadas con quien lo acusaba. Se fue de la casa, llegó al auto y se dio cuenta que le faltaban 30 mil pesos que llevaba encima.
Su compañera “La gringa”, Lidia Haydée Margarita Bay, entró a reclamar y cuando el Chango escuchó gritos, entró a la casa y tiro tres tiros al aire. El balazo se incrustó en el “Loro”, el anfitrión de la reunión. La sentencia de la Cámara determinó que el cantante fue hasta el auto a buscar una pistola calibre 45 y consideró el asesinato “premeditado”. Eso fue el 13 de diciembre de 1963. El Chango estuvo prófugo en Unquillo y a los dos días se entregó en la Comisaría Tercera. A la cárcel solo fue a visitarlo Gerardo López y Horacio Guarany, este último escuchó su zamba “Luna Cautiva” y fue el primero en cantársela.
60 años después escuchó en la radio que en la esquina Chango Rodríguez y Edmundo Cartos apresaron a un ladrón. Hace unas semanas encontré en un archivo una nota de Gardel con la historia de que era estafador y cuando lo quisieron denunciar acuchilló a alguien que dejó mal herido.
En fin… perdonen los puristas, me niego a tirar la mitad de mi biblioteca y discoteca por manchas personales. Es difícil no disfrutar cuando la Mery Murúa o el RALY BARRIONUEVO cantan un tema del Chango Rodríguez.
José Ignacio Rodríguez, conocido como el Chango Rodríguez (Córdoba, Argentina; 31 de julio de 1914 – 7 de octubre de 1975.