El Chaltén, destino que maravilla el alma
La cordillera de los Andes es el límite natural hacia el oeste. Separa Argentina y Chile, un cordón que se extiende miles de kilómetros con picos nevados y paisajes inusuales kilómetro a kilómetro. Entre montañas, hay pueblos escondidos y encantadores.
SANTA CRUZ.- La característica fundamental del relieve argentino es el enorme contraste que ofrecen las inmensas llanuras orientales y la impresionante cordillera de los Andes al oeste, la que posee la cumbre más alta del hemisferio occidental, el Aconcagua de 6.959 metros.
En su recorrido desde Jujuy hasta Tierra del Fuego, la cordillera exhibe la maravillosa variedad de su paisaje: desde los altiplanos del noroeste desérticos, con valles, quebradas y coloridos cerros, hasta la región de los lagos, bosques y glaciares de la Patagonia.
La aventura puede comenzar en Iruya, el pueblo colgado en la montaña, o elegir entre Villa La Angostura, el paraíso entre lagos patagónicos; Purmamarca, el pueblo entre cerros de colores; La Quebrada de Humahuaca; San Martín de los Andes, el paraíso de bosques y volcanes; Cachi en los Valles Calchaquíes; La Cumbrecita, conocido como el pueblo peatonal; Lago Puelo, un encanto entre pueblo y Lago. El paseo de hoy lo hacemos desde estas páginas al El Chaltén…
El pueblo de los senderos de naturaleza
Desde el pequeño pueblo de El Chaltén, uno de los más jóvenes de Argentina, parten senderos que parecen mágicos. El eslogan turístico local afirma que los senderos comienzan en la puerta de cualquier hotel.
Una joven villa turística en la Patagonia, al pie del inconfundible cerro Chaltén o Fitz Roy. Es conocida mundialmente como la Capital Argentina del Trekking por sus múltiples opciones para realizar deportes de montaña en un escenario natural sin igual.
El Chaltén se ubica en los andes australes, dentro del Parque Nacional Los Glaciares, en un valle donde confluyen los ríos De las Vueltas y Fitz Roy. El cerro Chaltén o Fitz Roy es la figura predominante del paisaje.
La localidad se creó el 12 de octubre de 1985, como decisión geopolítica en momentos en que la Argentina enfrentaba un conflicto con el vecino país de Chile por la demarcación limítrofe en la zona del lago Del Desierto y el Hielo Continental Patagónico Sur. El Parque Nacional Los Glaciares cedió a la Provincia de Santa Cruz un área de 135 hectáreas para el nuevo pueblo.
El pueblo está en una ecorregión denominada ecotono, la transición entre la estepa y el bosque. La planicie da lugar de manera abrupta a un sistema montañoso con boscosos valles surcados por ríos y arroyos. Las estaciones están bien definidas durante el año: el verano es templado con temperaturas medias de 12ºC, días con muchas horas de luz solar, normalmente ventosos y moderadas lluvias. El invierno es frío, con una temperatura media de 2ºC, días cortos, poco viento y esporádicas nevadas.
Capital del Trekking
El 12 de enero de 2015, mediante la Ley Nacional 27.055 se declaró a El Chaltén “Capital Nacional del Trekking”. De esta manera se reconoce oficialmente y se pone en valor a la extraordinaria combinación de elementos que sólo se dan en El Chaltén para los deportes de montaña: un ambiente natural prístino y protegido, numerosos circuitos de trekking con variados grados de dificultad, decenas de rutas de escalada de altísima dificultad técnica, y una localidad de servicios que se desarrolla en función del turismo activo.
Además de las caminatas por las sendas del Parque Nacional y montañas vecinas, se pueden contratar otras excursiones organizadas desde el pueblo, diversas actividades de turismo aventura que se realizan dentro y en los alrededores del Parque Nacional.
Servicios que ofrece
La infraestructura de servicios es muy variada y en continuo crecimiento. Para dormir existen muchas opciones, siendo los albergues, cabañas y departamentos las más populares. Según tus necesidades encontrarás además sitios de acampe, refugios de montaña, hoteles y hosterías. La gastronomía local ofrece sabores regionales y cocina internacional en sus restaurantes, pizzerías, bares y casas de té.
Origen del nombre
Su nombre se lo debe a la mítica montaña que se destaca del resto de los picos que la rodean. Chaltén es un término de la lengua aonikenk con la que los antiguos tehuelches nombraban a esta montaña que consideraban sagrada. Su significado es montaña humeante, pues ésa es la impresión que da cuando las nubes se encolumnan con el viento en su cima.
Vida silvestre
En esta casi deshabitada latitud del planeta la vida silvestre encuentra en sus valles y montañas un paraíso que en su gran mayoría continúa siendo virgen. Muchos seres vivos sólo pueden existir en estas condiciones ideales. El mejor ejemplo de la fragilidad de éste ambiente protegido por el Parque Nacional lo representa el huemul, un ciervo endémico en peligro de extinción.
Amanecer soñado
Si soñás con ver el amanecer más impresionante de tu vida, en El Chaltén se produce un curioso fenómeno. Las grandes cumbres de la cordillera se iluminan de un tono naranja súper intenso justo antes de salir el sol por el horizonte.
¿Cuál es el lugar más adecuado para ver este amanecer tan especial? Llegar hasta el Mirador de Los Cóndores, por una pequeña ruta que también sale desde el mismo pueblo y en aproximadamente 45 minutos te lleva hasta un balcón natural sobre El Chaltén pueblo y El Chaltén cordillera.
Cómo llegar a El Chaltén
En autobus, desde El Calafate, con salidas diarias tardan 3 horas en recorrer los 222 kilómetros por un camino totalmente pavimentado.
Por auto, existen dos vías principales para acceder a la zona de El Chaltén: la Ruta Nacional Nº 3 que bordea la costa atlántica es la más transitada (asfaltada en todo su recorrido) y la Ruta Nacional N° 40 paralela a la Cordillera de los Andes (con tramos de ripio). La opción más popular es la Ruta Nacional Nº 3.
En avión, el aeropuerto más cercano es el Aeropuerto Internacional El Calafate y desde allí se continúa en autobús hasta El Chaltén (210 Km / 2 horas).
Los vuelos de cabotaje operan desde Aeroparque o Ezeiza, Buenos Aires; Bariloche, Río Negro; Ushuaia, Tierra del Fuego y Río Gallegos, Santa Cruz.
Fuente: El Sureño.